Muhammad Mahamid, de 17 años, recibió un disparo en la cabeza durante las manifestaciones de la semana pasada en Umm al-Fahm. A pesar de los esfuerzos de los médicos del Hospital Rambam en Haifa, finalmente se vieron obligados a determinar su muerte cerebral. El tío de Muhammad, el doctor Raed Mahamid dijo: "Somos una familia que cree en la convivencia y quería salvar vidas independientemente de la religión, la raza o el género, y salvamos a seis personas".
Los órganos de Muhammad se trasplantaron durante el fin de semana en seis pacientes: el corazón en un hombre de 37 años y los pulmones en una mujer de 66, ambos en el Centro Médico Sheba, cerca de Tel Aviv. El hígado en un hombre de 69 años en el Hospital Beilinson, en Petah Tikva, y un lóbulo hepático en un niño de un año en Schneider, ubicado en la misma ciudad. Además, un riñón fue trasplantado en un joven de 16 años en el Centro Médico Rambam, en Haifa, en tanto que el riñón restante lo recibió un hombre de 35 años en el Hospital Ichilov, en Tel Aviv.
Respecto del hombre que recibió el trasplante de hígado, David Tardion, el doctor Eviatar Nesher, director del departamento de trasplantes en Beilinson, dijo: "David sufre de un tumor de hígado y el trasplante fue la mejor medicina para él. Fue el primero de ocho trasplantes llevados a cabo en el hospital en 36 horas, durante las cuales los médicos trabajaron sin descanso”.
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David Tardion, uno de los pacientes trasplantados, junto al doctor Eviatar Nesher y la doctora Sigal Aizner en el Hospital Beilinson.
(Hospital Beilinson)
Muhammad era el hijo menor de la familia y lo sobreviven sus padres, una hermana y dos hermanos. El doctor Raed Mahamid, tío de Muhammad, manifestó que su sobrino era un alumno sobresaliente de duodécimo grado. "Es una gran pérdida, todavía estamos en estado de shock y no podemos digerir el asunto del todo. Muhammad era un chico guapo y talentoso, presidente del consejo estudiantil de la escuela secundaria. Era un joven carismático que conocía toda la ciudad. A su funeral acudieron 40.000 personas, un hecho sin precedentes. Nuestro querido Muhammad era un niño prometedor con muchos sueños. Hace apenas una semana, hablamos sobre sus planes de vida. Dijo que quería ser ingeniero después de ver que su hermano, que es enfermero, estaba teniendo dificultades para encontrar trabajo”, relató.
La donación dio una pequeña esperanza
La decisión de la familia de donar los órganos no fue sencilla. "Estaba con el padre de Muhammad cuando tomó la decisión. Somos personas de fe y su padre recibió la confirmación del mufti de que estaba bien contribuir a salvar vidas de acuerdo con el islam, sin importar a quién. Su madre estaba convencida de que su vientre, que dio a luz a Muhammad, ahora también ayudaba a seis personas a seguir con vida, cinco de ellas judías. La valiente decisión no fue fácil, pero dio esperanza y un poco de alegría por haber dado vida a los demás”, explicó el doctor Mahamid.
A pesar de las terribles circunstancias de su muerte, que según Raed Maha
mid se produjo por "el disparo de un policía sin ninguna justificación que impactó contra la cabeza de Muhammad durante una manifestación legal", el doctor explicó que la familia dejó todo a un lado. "Y este es nuestro mensaje para las personas civilizadas que quieren vivir aquí, como ciudadanos iguales en el país: elegimos la vida, queremos una verdadera convivencia, sin discriminación. Espero sinceramente que este mensaje llegue, y es bueno que cinco de los trasplantados sean judíos, ya que esto sólo refuerza el mensaje”, agregó.
