Hasta octubre de 1938, las relaciones entre judíos y árabes en Tiberíades no habían experimentado crisis agudas. En los disturbios que habían tenido lugar casi una década antes, los judíos fueron asesinados en Hebrón, Jerusalem, Safed, Motza, Jaffa, Haifa en Hulda y Beer Tuvia. Pero nadie murió en Tiberíades.
Según el profesor Hillel Cohen, del Departamento de Estudios Islámicos y de Oriente Medio de la Universidad Hebrea de Jerusalem, los líderes del público judío y árabe publicaron entonces proclamaciones conjuntas contra la violencia. Incluso se señala que líderes comunitarios judíos y árabes marcharon juntos por la calle principal, codo a codo, para detener el creciente malestar en el área y enfatizar el compromiso de mantener las buenas relaciones.
Todo cambió el 2 de octubre de 1938. En un hecho histórico conocido desde entonces como la "masacre de Tiberíades", los árabes entraron en el barrio Kiryat Shmuel de la ciudad y asesinaron a 19 personas, incluidos 11 niños.
El ataque fue llevado a cabo por activistas campesinos, principalmente del pueblo de Lubia, a unos 10 km al oeste de Tiberíades, en el área donde se ubica ahora el kibutz Lavi.
"En términos del número de muertes, este fue uno de los eventos más trágicos en esos años de 1936-39", explica el profesor Cohen, quien ha estudiado las relaciones entre judíos y musulmanes a lo largo de la historia, y especialmente el conflicto en Israel.
“Entre 1930 y 1936 se dieron varios procesos importantes”, describe. “El número de judíos en el país casi se duplicó tras el ascenso de Hitler al poder en Alemania y como parte de la 'quinta aliá', que aumentó la sensación del público árabe de estar perdiendo su patria”, sostiene.
Los soldados británicos miraban una película
El investigador y guía turístico, Eviatar Lichtman, señala que el ataque asesino fue planeado y organizado. Decenas de atacantes árabes colocaron barreras de piedra en las carreteras, para impedir cualquier posibilidad de ayuda de los británicos o de la defensa.
Hacia las nueve de la noche se inició un ataque a tiros contra Tiberíades, y los vecinos se apresuraron a encerrarse en sus casas. El ataque se llevó a cabo en dos áreas al mismo tiempo: un primer grupo atacó la casa de gobierno y la prendió fuego, mientras que un segundo grupo ingresó al barrio de Kiryat Shmuel, y los vigilantes judíos que cuidaban sus calles fueron asesinados.
"Cuando los alborotadores árabes comenzaron a disparar en Kiryat Shmuel, una película era proyectada en un cine cercano. Allí estaban los soldados británicos", cuenta Lichtman. "La proyección de la película se detuvo, pero se reanudó poco después. Cuando los tiroteos se intensificaron y quedó claro que se trataba de un ataque, simplemente apagaron la luz del cine y se escondieron hasta que cesaron los tiroteos, en lugar de responder con disparos”, señala.