Decenas de miles de israelíes debieron pasar largos días de aislamiento en sus casas debido al coronavirus, pero probablemente nadie lo hizo durante tanto tiempo como Noah, una niña de 8 años que ya lleva 44 días sin salir de su hogar.
Noah se contagió el virus en Nueva York, en donde vive temporalmente con sus padres que trabajan en una comunidad judía, pero no bien levantó fiebre y antes de que se cerraran las fronteras la familia decidió volar a Israel. “No hay nada como estar en casa”, explicaron desde el asentamiento del sur del país en el que residen.
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Con una sonrisa pese a todo, Noah recibió al equipo médico que la examinó la semana pasada.
(Gentileza familiar)
“No para de hablar con sus amigas, es una chica muy sociable y las extraña. Hace un año que no ve a sus amigas israelíes porque viajamos a Estados Unidos, y tampoco ve a sus amigas estadounidenses desde que volvimos al país”, contó Heli, la madre de Noah.
Heli también se enfermó de coronavirus aunque ya fue dada de alta. Pero su hija no corre la misma suerte: el viernes pasado en su domicilio le realizaron un nuevo examen médico que determinó que el virus permanece en su cuerpo.
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No para de hablar con sus amigas, es una chica muy sociable y los extraña", expresó la madre de Noah.
(Gentileza familiar)
Afortunadamente la niña no padece fiebre ni ningún síntoma, y su madre destacó que sabe cómo mantenerse ocupada dentro del hogar: “Estudia, les enseña a sus amigas, se las ingenia para pasar el tiempo”, afirmó.
“Vamos a seguir aislados y creo que vamos a superar los 50 días de aislamiento, pero lo más importante es que Noah se siente bien, así que esperaremos con paciencia”, agregó la mamá.
