Dror Samadja, israelí de 7 años oriundo de Beer Sheva, murió a principios de esta semana al caer desde un cuarto piso en el departamento en que se hospedaba junto a su familia en Barcelona.
Yifat y Hagai, los padres de Dror, contaron detalles de la tragedia familiar: “Mientras nos preparábamos para el desayuno, escuchó a niños jugar al fútbol afuera y quiso verlos de cerca. En un segundo se apoyó contra la ventana y cayó”, lamentaron los padres de otras dos niñas de 9 y 3 años.
“Era un niño encantador, inteligente, sociable, lleno de sonrisas, bondadoso y sensible con los demás. Le encantaban los animales, los acertijos matemáticos, viajar con su familia y era hincha de Hapoel Beer Sheva”, lo describieron sus padres en medio del duelo.
El matrimonio agradeció “a toda la familia y amigos que nos ayudan a no sentirnos solos”, a las autoridades israelíes “que trabajaron día y noche ante sus pares españoles para traer a Dror a casa lo antes posible” y a los miembros de la comunidad judía de Jabad Lubavitch en Barcelona que los apoyaron en estas tristes horas fuera del país.
