El Instituto Nacional de la Salud en Italia estimó anoche (sábado) que alrededor de 6.773 residentes de asilos de ancianos murieron en febrero; el 40% de ellos habían contraído coronavirus o habían presentado síntomas de la enfermedad. No obstante, según estimaciones en el país europeo, donde ya se produjeron más de 22.000 decesos a causa del virus, el número es muy superior al reportado por las autoridades.
Un comité de investigación se formó en Italia para analizar los motivos de la crisis en los asilos.
Aparentemente, en Estados Unidos también fallaron en su intento de controlar el brote del virus en los asilos, ya que el número de residencias geriátricas alcanzadas por la epidemia aumentó de 47 a más de 400 en tan sólo una semana.
En Israel, donde alrededor de 37.000 ancianos viven en 400 residencias geriátricas, alrededor de un tercio de los muertos a causa del virus se produjeron en estas instituciones, lo que generó duras críticas por parte de los familiares de los fallecidos.
Después de que se descubriera que algunos infectados con coronavirus habían visitado asilos en Israel, el Ministerio de Bienestar y Servicios Sociales instruyó a todos las residencias geriátricas a no permitir el ingreso de visitantes. Según la directiva, los encuentros entre los ancianos y sus seres queridos deben llevarse a cabo fuera de los asilos, con la condición de que las personas que lleguen a la residencia geriátrica no se encuentren en aislamiento o no hayan estado en contacto con personas en cuarentena. En caso de que un residente no pueda salir, la institución debe permitir la entrada de un solo miembro de la familia directa, siempre que éste no haya regresado del exterior en los 14 días previos, que no viva con una persona que se encuentra en cuarentena y que no presente síntomas de la enfermedad.
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Hogar geriatrico Mishan en Beer Sheva, uno de los más golpeados por el coronavirus en Israel.
(Roee Idan)
Según las pautas del Ministerio de Bienestar y Servicios Sociales, los asilos deben estar preparados para un escenario en el que, a pesar de todas las medidas de precaución tomadas, una persona contraiga la enfermedad. Por este motivo, las residencias geriátricas deben contar un con un sector de aislamiento, donde el infectado no pueda tener contacto con el resto de los residentes ni con el personal del sitio. Además, los empleados del lugar deben acatar las estrictas pautas relacionadas con la higiene dictadas por el Ministerio de Salud.
Coronavirus en más de 400 asilos en Estados Unidos
Según la organización estadounidense CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades), alrededor de medio millón de personas residen en asilos para ancianos en Estados Unidos. Un vocero de la agrupación manifestó que más de 400 residencias geriátricas fueron alcanzadas por el coronavirus. Sin embargo, aún se desconoce el número exacto de infectados o de fallecimientos a causa del COVID-19 en estos centros.
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, señaló que hasta el martes pasado se registraron 1.456 casos de coronavirus, 278 de los cuales murieron en 188 asilos de ancianos en el país.
La agencia gubernamental CMS (Centros de Servicios de Medicare y Medicaid) recomendó a los asilos no permitir las visitas familiares para evitar la propagación del virus, e indicó que llevará a cabo inspecciones para verificar que se estén cumpliendo las directivas. Sin embargo, durante las semanas que transcurrieron desde que se impusieron las medidas, las residencias geriátricas reportaron que el virus continuó propagándose en esos centros, por lo que aparentemente, falló el control del brote en los asilos.
Según las directivas del CDC, las instituciones geriátricas deben actuar de forma inmediata para proteger a los residentes y sus familiares de enfermedades, razón por la cual recomendaron no permitir el ingreso a personas que presenten síntomas de la enfermedad y abastecerse de elementos de protección. De acuerdo con las pautas, las autoridades de los asilos deben controlar que aquellos encargados de entregar dichos elementos de protección, o sus familias, no deben encontrarse atravesando por el período de aislamiento impuesto por el Ministerio de Salud antes de ingresar a la institución.
Más del 50% de las muertes en Italia y España se produjeron en asilos
En Europa, alrededor de la mitad de los decesos por coronavirus se produjeron en asilos de ancianos, según reveló el periódico británico The Guardian. De acuerdo con un estudio académico de la Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres (LSE, por sus siglaes en inglés), en Italia, España, Francia, Irlanda y Bélgica, entre el 42% y el 57% de los decesos a causa del coronavirus se produjeron en residencias geriátricas.
En Bélgica, el 90% de los asilos para ancianos reportaron al menos una muerte por coronavirus. El 42% de los fallecidos residían en en estos centros.
En Italia, al menos 6.773 residentes de asilos fallecieron desde febrero, el 40% de ellos contrajeron el COVID-19 o presentaban síntomas de la enfermedad.
En España no hay datos oficiales, pero según reportes en los medios de comunicación, alrededor de un 57% de las víctimas mortales vivían en residencias geriátricas.
Sin embargo, la comparación internacional es limitada, debido a las diferencias respecto de la cantidad de pruebas de coronavirus realizadas, de las políticas entre los distintos países y del registro de defunciones.
Los servicios de salud nacionales en Italia estudiaron el motivo que causó graves dificultades en los asilos en estos tiempos de crisis de coronavirus. Entre los datos revelados, el 87% de las residencias geriátricas en Italia reportaron escasez de equipos de protección y de elementos médicos. Además, el 36% de los asilos señalaron que no cuentan con suficiente personal debido a la gran cantidad de contagios de los trabajadores de la salud.
En el distrito de Lombardía, se estima que un 10% de los residentes de centros geriátricos fallecieron a causa del virus (unas 600 personas).
El viceministro de Salud de Italia, Pierpaolo Sileri, manifestó que se debe revisar lo que sucede en los asilos para ancianos, donde “hay personas frágiles en estado crítico. Es una medida correcta”, dijo.
En este contexto, la policía italiana indicó que comenzó una investigación contra el asilo más grande del país, Pio Albergo Trivulzio, donde murieron 190 residentes a causa del coronavirus. La prensa local calificó la situación como una “masacre” de ancianos. El gobernador de Lombardía, Atilio Fontana, anunció la formación de un comité para investigar el hecho.
Fontana sostuvo, además, que las autoridades están investigando “la verdadera situación” de los asilos para ancianos en todo el distrito. El gobernador manifestó que es posible que el número de muertos e infectados sea menor al real.
En Europa se estima que el número de fallecidos es superior al que informan las autoridades debido a que a muchos de los ancianos que murieron no se les habían realizado las pruebas de coronavirus.
