Las autoridades sanitarias de Israel informaron este jueves por la mañana que, durante las últimas 24 horas, se registraron un total de 1.400 nuevos casos de coronavirus en todo el país, lo que marca la mayor cantidad de infecciones diarias en los últimos dos meses. Según datos del Ministerio de Salud, hay 9.591 portadores activos, la mayoría de los cuales mostraban síntomas leves o nulos.
Durante la última jornada, se llevaron a cabo alrededor de 98.500 pruebas de coronavirus, lo que sitúa la tasa de contagios en un 1,44%, también la cifra más alta reportada en semanas. Mientras tanto, el número R de Israel, que mide cuántos casos nuevos surgen como resultado de una sola infección, se situó en 1,34, lo que indica que la propagación del brote se está acelerando.
2 צפייה בגלריה
Niños de una escuela de Binyamina atraviesan el test de coronavirus ante un brote de contagios.
(AP)
Los hospitales israelíes están tratando actualmente a 124 pacientes con COVID-19, 83 de ellos en estado grave. A su vez, de los que desarrollaron enfermedades severas tras contraer el patógeno, 70 no están vacunados, lo que representa el 84% de todos los casos. Los no inoculados también representan más del 93% de los casos graves entre las personas menores de 60 años.
Los datos del Ministerio de Salud muestran que, también durante las últimas 24 horas, 9.402 israelíes recibieron su primera dosis de vacuna contra el coronavirus, la mayoría de los cuales eran niños de entre 5 y 11 años, y 5.715 personas fueron vacunadas con una inyección de refuerzo. Desde el domingo, 33.392 israelíes recibieron su primera dosis de vacuna, mientras que 22.875 recibieron su vacuna de refuerzo.
Durante la noche del jueves, el primer ministro Naftali Bennett dijo en conversaciones cerradas que creía que la propagación de la variante del coronavirus Ómicron alcanzará proporciones masivas, pero será de corta duración. "Habrá un gran caos, pero será relativamente breve. Alcanzaremos cifras increíbles", dijo el primer ministro a sus allegados.
También abogó por nuevas restricciones con la esperanza de evitar otro bloqueo, ya que el número de casos diarios de coronavirus confirmados superó los 1.000 por primera vez en dos meses . "Nadie quiere un bloqueo, pero no se puede predecir el futuro; nuestro objetivo es actuar con toda la fuerza para que no haya un bloqueo", añadió.
Mientras tanto, Israel se convirtió el martes en el primer país del mundo en comenzar a ofrecer una cuarta inyección de refuerzo de la vacuna contra el coronavirus, poco después de que los ministros advirtieran que el país podría dirigirse hacia un bloqueo general el próximo mes. La oficina de Bennett dijo que se espera que la campaña, que aún requiere aprobaciones burocráticas, comience en los próximos días.
Previo a la reunión, los ministros aprobaron mediante votación telefónica reducir la asistencia de los empleados públicos al 50% del 26 de diciembre al 26 de enero. Los funcionarios del Ministerio de Salud también presentaron al resto de los ministros una lista de recomendaciones, incluido el ajuste de los límites de reunión en empresas y eventos públicos.
El panel también acordó un esquema que solo permitiría el aprendizaje en ciudades con brotes graves de COVID-19 si al menos el 70% de los estudiantes han sido vacunados. Si las tasas de inmunización están por debajo del 70%, las escuelas deberán volver a la educación a distancia.
