El ministro de Salud de Israel, Nitzan Horowitz, dijo el martes que los primeros datos muestran que las personas que han recibido la vacuna de refuerzo contra el coronavirus están bien protegidas contra la nueva variante de Ómicron.
Agregó que pronto estarán disponibles datos más completos sobre la eficacia de la tercera dosis de refuerzo.
Al visitar el Centro Médico Soroka en Be'er Sheba junto con el ministro de Finanzas, Avigdor Liberman, Horowitz dijo que Israel continuará trabajando para mantener la economía abierta.
"Nuestra política es, y seguirá siendo, vivir junto al coronavirus", señaló. "Esto significa garantizar la salud pública a través de cualquier medida de protección que tengamos a mano contra el virus y sus variantes, manteniendo al mismo tiempo una economía abierta, negocios, escuelas, cultura, deportes, vida cotidiana y el sustento de las personas".
Horowitz agregó que los funcionarios aún no están completamente seguros de cuán peligrosa es la nueva cepa, pero que el país "volverá a la normalidad lo antes posible".
"No tenemos intención de promulgar restricciones innecesarias durante un período prolongado", dijo, y agregó: "Una vez que podamos, trabajaremos para poner fin a esto".
Horowitz instó a los israelíes a no entrar en pánico por la nueva cepa, y añadió que el estado estaba preparado para tal escenario.
"La situación está bajo control, no hay necesidad de pánico", expresó. "Esperábamos una nueva variante, y estamos listos. Debemos continuar la campaña de vacunación y asegurarnos de que las personas sean financieramente capaces de seguir viviendo".