Israel informó el martes de la primera muerte del país relacionada con la variante Ómicron del coronavirus.
El Centro Médico de la Universidad de Soroka, en la ciudad sureña de Be'er Sheva, informó que un hombre de unos 60 años que sufría de malas condiciones de salud preexistentes falleció el martes, después de haber pasado dos semanas en estado crítico en el hospital.
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Centro Médico de la Universidad de Soroka, donde falleció la primera víctima israelí de Ómicron.
(Herzl Yosef)
"Su enfermedad se debió en gran parte a patologías preexistentes y no a neumonía como resultado del coronavirus", señaló el portavoz del hospital.
"La prueba PCR inicial levantó sospechas de la presencia de la variante Ómicron y, por lo tanto, la prueba se envió para la secuenciación del ADN", añade la información.
El hospital agregó que recibió la confirmación de que el hombre había sido infectado con Ómicron algunas horas después de su muerte.
"Su enfermedad se debió en gran parte a patologías preexistentes y no a neumonía como resultado del coronavirus"
Además, parece que el paciente había sido vacunado con sólo dos dosis contra el COVID-19, y no con el refuerzo. El paciente fallecido llegó a informar que había recibido la última dosis de la vacuna hacía más de seis meses.
Israel ha estado luchando contra la propagación de la nueva cepa durante las últimas semanas, ha prohibido la entrada de extranjeros y agregó una serie de países a su lista de "exclusión aérea" por las altas tasas de infección en esos lugares de destino.
