Después de un giro político que posibilitó su compra, en Israel se empezó a suministrar un nuevo remedio contra el coronavirus: el Regeneron, un cóctel de anticuerpos neutralizantes inyectable, indicado para las primeras etapas de la enfermedad.
El Regeneron está diseñado para detener la propagación del virus por el sistema respiratorio y puede evitar que pacientes con COVID-19 empeoren su condición. El Ministerio de Salud determina mediante una fórmula quiénes son los enfermos con alto riesgo de mortalidad, y este jueves los servicios médicos llevaron la medicación a los domicilios de los primeros 19 israelíes elegidos.
La primera israelí en recibir este tratamiento fue una mujer de 81 años que vive en la localidad de Kabul, en el norte del país. “Es un día histórico y emocionante, estoy orgullosa de estar entre los primeros miembros del personal de salud que llegaron al domicilio de un paciente para brindar atención y evitar que una infección se convierta en una situación difícil”, expresó Rinat Basel, directora de enfermería del servicio médico Clalit.
“Ingresamos a la casa de los pacientes con un médico, una enfermera y un paramédico con un equipo de reanimación”, contó Basel sobre el procedimiento que comenzaron a practicar este jueves. “La paciente estaba tranquila y nos quedamos cuidándola una hora más”, agregó sobre esta primera experiencia.
El doctor Doron Netzer, jefe del departamento médico de la división comunitaria de Clalit, describió a esta jornada como “otro día importante en la lucha contra el coronavirus” y resaltó que Israel está “entre los primeros países del mundo en proporcionar tratamiento con anticuerpos en los hogares de los pacientes infectados, lo que revela la fortaleza y capacidad israelí para proporcionar tratamientos innovadores”.
“Se trata de una operación médica y logística muy compleja, que requiere una estricta seguridad y calidad de atención”, explicó Netzer, miembro de uno de los servicios médicos que comenzaron a brindar esta atención que hoy alcanzó a 19 pacientes, pero que con el correr de las semanas se volverá más masivo según las necesidades sanitarias.