La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) negó rotundamente el domingo un informe de que se estaba preparando para poner fin a sus actividades en la Franja de Gaza y en Cisjordania, en el contexto de la legislación israelí sobre el tema, después de que el New York Times informara el viernes que la agencia estaba "preparando el cierre de sus operaciones debido a las nuevas restricciones israelíes".
El informe citó a Louise Waterridge, una alta funcionaria de la UNRWA, diciendo que la ley socavaría la necesaria coordinación con Israel para la transferencia de ayuda en los territorios. Dijo que "la vida de nuestro personal estará en peligro" si la información no se comparte con las autoridades israelíes. "El cese de las operaciones tendrá un impacto enorme en una situación que ya es catastrófica", agregó Jamie McGoldrick, quien estuvo a cargo de las operaciones de ayuda de la ONU en Gaza y Cisjordania hasta abril. "Si ésta es la intención de Israel, impedir nuestra capacidad de ayudar a salvar vidas, debemos preguntarnos cuál es la lógica y cuál es el objetivo final", agregó.
Los partidarios de UNRWA afirman que el cese de las actividades sería un golpe fatal para la población palestina. "La agencia proporciona servicios como alimentos, agua, educación y medicinas, y miles de residentes dependen de ella todos los días. El mundo nos ha abandonado", dijo un palestino al New York Times.
Sin embargo, Juliet Thomas, directora de comunicaciones de la UNRWA, rechazó el informe, describiéndolo como "extremadamente inexacto". Thomas señaló que el director general de la agencia, Philippe Lazzarini, había subrayado previamente el compromiso de la agencia de seguir prestando servicios esenciales. "Si alguien tiene una opinión, no significa que sea la correcta", dijo.
La ley israelí, que fue presentada por el diputado del Likud Dan Iluz y entrará en vigor este mes, prohíbe la actividad de la UNRWA en Israel, Gaza y Cisjordania al impedir cualquier contacto oficial entre los funcionarios israelíes y la agencia, incluidas las FDI.
2 צפייה בגלריה
Lazzarini destacó el compromiso de la UNRWA de seguir trabajando en los territorios.
(AP)
El proyecto de ley contra la UNRWA, que fue aprobado hace dos meses, se produjo después de muchos informes sobre su conexión con la masacre del 7 de octubre, y después de un informe de la ONU que confirmaba que nueve empleados de la UNRWA habían participado activamente en el ataque de Hamas.
La presión sobre la UNRWA aumentó después de que muchos países occidentales, incluidos Estados Unidos, Suiza y Gran Bretaña, congelaran o detuvieran la financiación de la agencia por "temor a usar fondos con fines terroristas", una medida que exacerbó aún más las dificultades de la agencia.
